Pinto mi Raya se inauguró con la exposición Algo como el agua en la que Víctor Lerma y yo presentamos dibujos o muy grandes o muy chicos cuyo tema era el agua. Mi trabajo de ese momento es parte de la serie Los naufragios del cuerpo.
No sé qué decir sobre estas piezas. ¿Qué son sobre la zozobra? ¿Qué tienen que ver con soltar el control y dejarse ir? ¿Qué se refieren a la destrucción y la resiliencia? ¿A la vida y a muerte? ¿A la vulnerabilidad? ¿Al erotismo?
Al igual que el trabajo que hice en torno a la maternidad en el proyecto Novela rosa o me agarró el arquetipo que tuvo su contraparte performática en el proyecto ¡MADRES! que trabajamos en Polvo de Gallina Negra, esta serie se da de manera paralela a la formación de Pinto mi Raya y al performance Boda Falsa. En este, como en muchos otros proyectos, me acerco al tema desde una multiplicidad de enfoques. A veces uso diversos soportes artísticos y en ocasiones integro elementos de texto y activismo. Creo que si tuviera que definir lo que hago como artista sería borrar límites y fronteras entre arte y vida, entre disciplinas y enfoques artísticos.
Esta es una imagen de la exposición en Pinto mi Raya y abajo les comparto el texto que escribió en aquel entonces Carlos Blas Galindo.
Los dibujos de gran formato de esta serie se han presentado en varias exposiciones como Dibujo de Mujeres Contemporáneas en el Museo de Arte Moderno en 1990 al cual me refiero en un texto sobre las exposiciones de mujeres artistas y en el Salón de Triunfadores, curado por Raquel Tibol.
Mónica Mayer, 2016